Zaragoza, 12 de junio de 2017.- La diputada portavoz del Partido Aragonés (PAR) en la Comisión de Hacienda de las Cortes de Aragón, Elena Allué, ha valorado hoy en rueda de prensa los efectos del incumplimiento del Déficit de 2016 en Aragón y la alarma creada por la AIREF (Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal) sobre los elevados riesgos que conlleva que Aragón incumpla en 2017 los objetivos de estabilidad presupuestaria, regla de gasto y cumplimiento del límite de deuda.
Elena Allué ha recordado al Gobierno de Lambán que cumplir el objetivo de déficit “es una obligación y no una opción”. En este sentido le ha reclamado medidas “urgentes” que frenen “la sangría y el caos” presupuestario y solventen los problemas estructurales en la sanidad y en el gasto farmacéutico (152 millones gastados sin consignación en la cuenta 409). Y ha defendido que el PAR defiende que se cubran las necesidades básicas de las personas más desfavorecidas sin dejar de lado la reactivación de la economía y la dinamización de los sectores estratégicos de Aragón para que se siga generando “empleo” ya que la creación de empleo “es la mejor política social”.
El Partido Aragonés, ha señalado Allué, cree en la estabilidad presupuestaria, en la disciplina presupuestaria, en este modelo económico y en la recuperación económica. Sin embargo y aún con todo, Allué manifiesta que el consejero de Hacienda del Gobierno de Aragón, Fernando Gimeno, anunció en 2016 que cumpliría con el objetivo de déficit (debía cumplir el 0’7% y se ha llegado al 1’1%…) y también dijo que en 2017 “cumpliría con el objetivo de déficit marcado del 0’5%”.
La diputada del PAR ha criticado que Gimeno elaboró unos presupuestos en 2016 para cumplir con el objetivo de déficit, que estaba por entonces en el 0’3%, con los elevados riesgos de “incumplirlo” y se elaboró un reajuste flexibilizando el déficit al 0’7%. Bajo dicho escenario y a pesar de todas las retenciones, indica Elena Allué, se seguía “advirtiendo” del riesgo de incumplimiento. “Ahora hemos conocido el Déficit acumulado definitivo en 2016 que alcanza el 1,08% (373m€)”, ha lamentado.
Estabilidad presupuestaria
En cuanto al cumplimiento de la estabilidad presupuestaria, regla de gasto y deuda para 2017, Elena Allué ha manifestado que “hemos conocido el recién publicado Informe de la AIREF de 29 de Mayo que arroja su elevada preocupación por incumplimiento de Aragón de todos los indicadores”. Estos incumplimientos vuelven a poner en “riesgo” un año más “la posibilidad de que Aragón cuente con la suficiente credibilidad y confianza para generar empleo y riqueza”.
Equilibrio presupuestario
El PAR defiende que el equilibrio presupuestario es “fundamental” para mantener “el estado de bienestar y generar empleo”.
Los nuevos incumplimientos por parte del Gobierno de Aragón, indica Elena Allué, llevará a la Comunidad a la “desconfianza en los mercados” con los perjuicios que esto supondrá para Aragón. Por eso “pedimos al presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, sensatez y coherencia para buscar la salida a una situación caótica en la gestión del dinero público por parte del Gobierno autonómico”. Y todo ello, añade la diputada del PAR, teniendo en cuenta que aun flexibilizando el objetivo de déficit (En 2016 se amplió del 0’3 al 0’7% y en 2017 del 0,1% al 0,5%), el Gobierno de Aragón es incapaz de cumplirlo.
El PAR recuerda que la AIREF acaba de realizar un Informe en el que hace constar, entre otras cosas, que considera improbable que Aragón alcance en 2017 el objetivo de estabilidad fijado, ya que con el Presupuesto recién aprobado los cambios y ajustes necesarios sobre el control de gastos no se han efectuado. Además, se siguen detectando riesgos altos para la sostenibilidad financiera y el cumplimiento de deuda y dice, explica Elena Allué, que Aragón tiene que realizar en 2017 un esfuerzo superior a la media nacional para alcanzar el objetivo en este año y afirma que es “improbable” que se vaya a cumplir con el objetivo de estabilidad para 2017 por los riesgos de desviación apreciados en las partidas de gastos.
De la misma manera aprecia que la evolución esperada del gasto genera “tensiones” que pueden comprometer el cumplimiento de la regla de gasto en 2017. SE detectan, también, riesgos “altos” para la sostenibilidad financiera y el cumplimiento del límite de deuda.