Un virus que empezó a circular en China en apenas unos meses ha llegado a todo el mundo. La realidad nos ha explicado de una dolorosa manera cómo influye en nuestra vida ese fenómeno en el que vivimos que se llama globalización. Cada día conocemos nuevos planes con los que contener una pandemia de proporciones y dimensiones desconocidas. Y yo me pregunto ¿qué podemos hacer cada uno de nosotros, desde las instituciones más cercanas al ciudadano y también en nuestro día a día como ciudadanos?.
Tras contener la emergencia sanitaria hay que mirar al futuro y devolver la actividad real y con ella la económica a nuestros pueblos y yciudades, pensando sobre todo en aquellos sectores que se han visto económicamente más afectados. Desde las instituciones creo que es fundamental impulsar la obra pública, con los recursos que tenemos y acelerando la tramitación en lo posible. Así lo hemos hecho desde la Diputación de Teruel, con el acuerdo de todos los grupos políticos, y sin olvidar el apoyo a los ayuntamientos y de manera concreta a sectores muy afectados, como el de las ganaderías de lidia, los servicios sociales o el sector cultural entre otros.
Pero creo que también es necesaria una reflexión personal de cada uno para que con nuestras acciones demostremos un compromiso con quienes nos rodean, algo importante siempre pero hoy más que nunca.
En estos tiempos se comprueba la fortaleza de los territorios que creen y confían en sí mismos, y en la provincia de Teruel tenemos que empezar a confiar más en nuestros recursos. Muchos conocerán el dicho de “compra en casa, vende en casa y harás casas”. Pues bien: es el momento de aplicarlo más que nunca; comprando en nuestras tiendas, consumiendo productos de la provincia y haciendo turismo para descubrir territorios y atractivos que han sabido apreciar desde otras provincias pero para muchos turolenses son desconocidos. Desde la Diputación les echamos una mano, impulsando una campaña de bonos turísticos pero necesitamos la aportación de todos. Porque tenemos riqueza de sobra en la provincia, solo hay que pararse un poco para volver a descubrir Teruel y de este modo “hacer provincia”, ayudando a nuestros vecinos, a nuestros amigos, a nuestra comunidad. Es la manera de mostrar el compromiso con los nuestros, un año al menos como pedía hace unos días este diario, pero por qué no ser más ambicioso y pensar que puede ser otra manera de actuar que ha llegado para quedarse.
Comprar en nuestros comercios locales, en nuestras zapaterías, consumir productos agroalimentarios de Teruel, gastar en nuestros bares y restaurantes, leer a escritores locales y comprar discos de nuestros músicos o visitar atractivos turísticos de la provincia es el hacer casa de nuestro tiempo.
La crisis que vivimos es mundial, pero podemos hacer mucho desde lo local, con nuestras acciones diarias. Del mismo modo que los ayuntamientos, la institución más cercana, con el apoyo de las diputaciones, están dando soluciones locales a este pandemia global. Apunten en los despachos de las grandes ciudades que los ayuntamientos son los que están en el día a día de los vecinos, por eso necesitan ayuda en forma de financiación y facilidades, y no trabas para gastar sus ahorros.
Mientras nosotros, con nuestros gestos diarios, trabajaremos por nuestra provincia.