Huesca, 14 de abril de 2018.- El Partido Aragonés del Alto Aragón ha hecho pública una propuesta con distintas medidas, dirigida a las diferentes administraciones, con el objetivo de “garantizar al máximo los servicios, suministros y actividad en las comarcas de la Jacetania y Alto Gállego” tras el hundimiento de la carretera en obras de conversión en autovía, que supera el puerto de Monrepós y “constituye la principal, con diferencia, comunicación para toda la zona y miles de familias, establecimientos, explotaciones agrarias, industrias y empresas”, a la espera de su reapertura provisional anunciada para dentro de siete o diez días.
Desde el mismo momento en que se produjo el incidente, Jesús Guerrero, presidente del Comité intercomarcal del Alto Aragón del Partido Aragonés (PAR) y diputado en Cortes, junto con la también diputada altoaragonesa del PAR, Lucía Guillén, han mantenido contacto con los presidentes de los comités comarcales del partido en la Jacetania, Fran Aísa, y Alto Gállego, Javier Mimbrera, así como con alcaldes y concejales del PAR en el área afectada, para recabar “su máxima preocupación por los efectos para la vida cotidiana de los vecinos y el funcionamiento de negocios que sostienen tantos empleos”.
En consecuencia, desde el PAR del Alto Aragón, además de “celebrar que el deslizamiento no haya causado víctimas afortunadamente”, se plantea “acciones inmediatas, algunas de las cuales deberán graduarse en función de la duración definitiva del corte de la carretera ya que intervienen múltiples factores, entre ellos nuevas inclemencias del tiempo, y de las características finales de la variante provisional anunciada”. En ese sentido, el Partido Aragonés esperará a comprobar las condiciones para el paso de vehículos y demanda que la reapertura temporal se produzca “con seguridad absoluta”, indicando también que “si las obras de la autovía no hubieran acumulado aplazamientos sucesivos desde 2010, la solución haría sido inmediata por el túnel de Escusaguás, pendiente de concluirse”.
Hasta recuperar completamente el tráfico de la N-330, el PAR reclama “atención total a la vialidad en la complicada A-132 por el puerto de Santa Bárbara, con mayor dotación de recursos desde el Gobierno de Aragón, titular de la carretera, y de las fuerzas de seguridad, incidiendo en la información, señalización y vigilancia en los tramos más estrechos o sinuosos, en las travesías y en poblaciones como Alerre, Esquedas, Ayerbe, Murillo, Bailo, Santa Cilia y en intersecciones como el desvío a Agüero, túneles y puentes, por ejemplo”. Unas actuaciones que “alcancen a otras alternativas, como la carretera por Anzánigo y Caldearenas a Hostal de Ipiés, o la N-260 a Fiscal y Aínsa”. En todos los casos “el mal estado de muchos de los tramos, para los que se ha pospuesto su mejora, se revela hoy en todas sus carencias”.
Hospital y campaña de información positiva
Con un enfoque similar, el Partido Aragonés solicita que se refuerce “en el grado preciso, las posibilidades de asistencia sanitaria en el Hospital de Jaca, a fin de evitar traslados, tanto en caso de emergencias como de intervenciones, consultas, partos… La realidad ha venido a demostrar la importancia de este hospital del Pirineo y el centro tiene que incrementar, en estas circunstancias y en adelante, su potencial.” En ese mismo sentido, para los casos más graves, “es incuestionable que resulta necesario disponer de la operatividad del helicóptero del 061 o 112 que facilite evacuaciones que, de otro modo, por el trayecto prolongado y difícil de la A-132 o a expensas de la nueva variante en la cima del Monrepós, entrañarían riesgos”.
En cuanto al abastecimiento y suministros, transporte de mercancías y otras actividades habituales de los establecimientos, industrias y empresas, el PAR indica que, “en función de la prolongación de esta situación, de los nuevos carriles provisionales -si admiten todo tipo de transportes con fluidez- y con vistas al futuro, hay que estudiar las opciones factibles para potenciar el ferrocarril, con plataformas rodantes para camiones por ejemplo, que pudieran ser ofrecidas a las compañías del sector a precios razonables, entre otras facilidades, sin necesidad de esperar a los planes para el tren internacional del Canfranc. Hay que repetir que si las inversiones en la línea Huesca-Canfranc se hubieran acometido, todo ello podría estar en servicio”.
El Partido Aragonés entiende que el perjuicio económico va a ser grave para la hostelería, el comercio y el turismo puesto que “a pesar de la conclusión, salvo en una estación, de la temporada de nieve, el movimiento de visitantes también es relevante en primavera y puede verse restringido en adelante ante las dudas sobre el estado del Monrepós, aunque se habilite la alternativa provisional anunciada”. Por ello, “se pide una campaña de información y promoción sobre todo en redes sociales y medios de comunicación que, cuando proceda, se oriente a contrarrestar la imagen negativa e incertidumbre sobre los accesos, creadas por lo aparatoso del deslizamiento”.
Finalmente, el PAR “va a continuar estudiando y planteando -más allá de solamente cuestionar las causas de lo sucedido como se han apresurado algunos partidos-, todas las posibilidades que sean adecuadas desde el punto de vista del Partido Aragonés para, esperando el restablecimiento del tráfico por el Monrepós y que no haya otras eventualidades, brindar a los habitantes de la Jacetania y el Alto Gállego, medios de paliar las afecciones de esta incomunicación y procurar la mayor normalidad, dentro de la comprensible inquietud y evidentes inconvenientes”.