El Partido Aragonés ha planteado al próximo pleno de la Diputación de Huesca una resolución en la que propone exigir al Gobierno de Aragón que adopte como criterio general, la «imprescindible compatibilidad» de cualquier nueva medida de protección ambiental con las actividades, expectativas y aspiraciones de los habitantes las zonas afectadas. Por ello, señala al diálogo previo y acuerdo con sus representantes como «factor inexcusable» en la elaboración de las normas de conservación de la naturaleza, «nunca de inferior consideración a las aportaciones técnicas», para alcanzar una «regulación equilibrada» de la preservación respecto a los «derechos y perspectivas» de los altoaragoneses. La iniciativa pretende fijar condiciones a la DGA en esta materia, tras el rechazo al Plan de la rana pirenaica, un «ejemplo negativo» para el que se demanda la «corrección de las tajantes prohibiciones». El Grupo Aragonés (PAR) en la Diputación de Huesca va a defender en la sesión plenaria que la próxima semana celebrará la DPH, una propuesta de resolución para que el pleno adopte «una posición rotunda y exigente de respeto social y equilibrio», ante el establecimiento de cualquier regulación de protección ambiental. Esta iniciativa se dirige a conseguir, «con la fuerza de un acuerdo de carácter institucional, que el Gobierno de Aragón fije criterios generales de valoración de las actividades, expectativas y aspiraciones de los habitantes de las zonas afectadas, a través del diálogo previo y entendimiento» sobre las normas de conservación de la naturaleza. El planteamiento del Partido Aragonés se origina tras el rechazo al Plan de protección de la rana pirenaica «y se apoya en el ejemplo de lo que no puede volver a suceder ni con este decreto ni con otras disposiciones futuras».
El PAR incide en que el anuncio de retirada de ese proyecto en concreto, «no oculta la necesidad de defender la coordinación y compatibilidad entre la subsistencia y perspectivas de futuro de los altoaragoneses del Pirineo y otras comarcas, el asentamiento de la población, las posibilidades de mejora de servicios, de trabajo y medios de vida, en los que el turismo es un componente fundamental, con la también imprescindible conservación de la naturaleza. Cualquier decisión de preservación ambiental requiere que disposiciones como la referida contemplen ambas realidades y sean fruto del acuerdo, sin exceso de celo en las exigencias y prohibiciones que pongan en riesgo o en bloqueo el presente y horizontes de los habitantes de esas comarcas.»
El Partido Aragonés entiende que las diversas limitaciones fijadas por el decreto sobre la rana pirenaica, ahora retirado, «son una muestra de restricciones que pondrían en riesgo empleos, oportunidades, vida de los pueblos, acciones e inversiones públicas y privadas de todo tipo, en zonas que ni siquiera forman parte actualmente de espacios protegidos».
Con ese «modelo negativo», el Grupo Aragonés «quiere que el debate público no pase al olvido sino que se transforme en un enfoque renovado de estos asuntos». Por ello, la propuesta de resolución del PAR en la DPH plantea que la Diputación inste al Gobierno de Aragón a que «adopte como criterio general, ante el establecimiento de un régimen de protección para la rana pirenaica y su hábitat, para otras especies amenazadas o en general, para espacios naturales, la imprescindible compatibilidad de sus medidas y de la preservación del medio ambiente respecto de las actividades y actuaciones realizadas en respetuoso aprovechamiento y convivencia con la naturaleza, así como de las expectativas y aspiraciones de los habitantes de las zonas incluidas».
Bajo esta convicción, el Partido Aragonés propone que la DPH exija a la DGA que «programe que la comunicación y diálogo con los ayuntamientos, comarcas, entidades y empresas de los municipios incluidos en futuras normas de protección sea un factor inexcusable en el proceso previo de elaboración de las mismas, nunca de inferior consideración a las aportaciones técnicas, a fin de alcanzar un acuerdo sobre una regulación equilibrada, que considere prioritarios sus derechos y perspectivas más allá del simple recurso a la alegación ‘a posteriori'».
Finalmente, el PAR propone que «de cara a un nuevo plan de conservación de la rana pirenaica, se determine una modulación y corrección de las tajantes restricciones y prohibiciones que han sido formuladas en el proyecto de Decreto, por cuanto pueden suponer un obstáculo definitivo para el barranquismo y otras modalidades del importante sector del turismo activo así como para determinadas iniciativas locales».
El Partido Aragonés solicita la implicación de la Diputación de Huesca que, según la iniciativa, «permanecerá vigilante ante el planteamiento de nuevas medidas o espacios de protección y prestará asistencia a los ayuntamientos y comarcas que así lo soliciten en esta materia».