La diputada Elena Allué anuncia la presentación de una proposición de ley para eliminar de la Ley de Medidas para el Mantenimiento de los Servicios Públicos en Aragón, el impuesto medioambiental sobre las estaciones de esquí. El PAR considera que el nuevo tributo supone «un mazazo» para la economía aragonesa «aumenta el precio del forfait restando afluencia de esquiadores, lastra la competitividad de las estaciones y perjudica la reactivación económica». El Partido Aragonés presentará una proposición de Ley con la que pretende que se elimine de la Ley de Medidas para el mantenimiento de los servicios públicos en Aragón, el Impuesto medioambiental sobre las instalaciones de transporte por cable.
Las diputadas Elena Allué, Berta Zapater y Lucía Guillen, han rechazado hoy en rueda de prensa el nuevo tributo, al considerar que supone «un mazazo» para Aragón, y han defendido la eliminación del impuesto con esa intención han presentado la iniciativa- «ya que que perjudica el bolsillo del ciudadano, la reactivación de la economía, y lastra la competitividad de las estaciones».
La diputada Elena Allué ha señalado que este tributo fue creado en 2005 y derogado justo cuando las consecuencias de la crisis económica empezaron a aflorar de manera significativa, golpeando de lleno a muchas familias y empresas aragonesas. Esa misma justificación, señala, es la que debería hacer replantear esta medida al actual equipo de Gobierno de Aragón PSOE-CHA «Aragón lleva 8 años de intensa crisis económica que ha incidido en la economía de las empresas y en la destrucción de empleo», subraya la diputada.
La diputada Lucía Guillen mantiene que «no es de recibo ni explicable» que justo ahora, cuando los indicadores económicos reflejan una mejoría y una recuperación del pulso económico que tanto necesitan las empresas para volver a generar empleo y riqueza en el territorio aragonés, la DGA pretenda «volver a grabar y por tanto volver a castigar a un sector que en Aragón sigue siendo estratégico». Y recuerda que el sector de la nieve representa entre el 40 y el 68% del PIB de la economía de los territorios donde se implantan las estaciones de esquí, tanto públicas como privadas. Más de 1000 empresas generan su actividad en torno al producto turístico de la nieve, 15.000 empleos directos e indirectos se generan en las temporadas de esquí, las 7 estaciones de esquí albergaron en la última temporada 1.350.000 usos y el impacto económico que se genera en los valles asciende a unos 140 millones de euros cada temporada.
Por su parte, la diputada Berta Zapater ha insistido en los datos más relevantes que se arrojan en este sector de los que se deduce que, del impacto económico que genera la nieve en Aragón, un 20% se consumen en las estaciones de esquí y un 80% se queda en los valles en forma de alojamiento, y entre otras cosas comidas y compras «debemos ser conscientes de que el impulso de este nuevo tributo que grava a las estaciones de esquí va a repercutir directamente en la subida del precio del forfait, lo que va a hacer menos competitiva la oferta de nieve aragonesa y una fuga de esquiadores a territorios como Baqueira, Sierra Nevada o Andorra con precios más ajustados».
Esta medida, justifican, Allué, Zapater y Guillén «lastra la competitividad de nuestras empresas aragonesas afincadas en los valles donde hay estaciones de esquí y restará esquiadores que se sentirán atraídos por precios más accesibles a sus bolsillos, lo que dañará, de nuevo las maltrechas economías de las empresas que viven del sector de la nieve, la mayoría de ellas pequeñas y medianas empresas y autónomos».