Las concejales del PAR, Berta Zapater Vera, y Ana Belen Andreu, ya mostraron su repulsa inmediata y tacharon y tachan los hechos como una reacción «totalmente desafortunada, despreciable y machista».
Ambas concejales han manifestado sentirse «ofendidas por esos comentarios intolerables, machistas y desacertados». Además, han lamentado que actitudes de este tipo puedan ser defendidas como así hicieron «compañeros de otros partidos».
En este sentido el PAR muestra repulsa a la respuesta del alcalde, que en lugar de parar los lamentables declaraciones del concejal de Ciudadanos, dijo que «las comprendía como dentro de un ámbito cómico y simpático”. «Es inadmisible», valoran desde el PAR.
Zapater, tras defender la libertad educativa, indica que en el siglo XXI «no se pueden tolerar ni permitir este tipo de comentarios machistas y ausentes de todo respeto». Estamos, ha manifestado, en un ámbito «serio en el que no caben las payasadas, y exigimos que el alcalde llame al orden ante acontecimientos como este». «Esperamos que no vuelvan a ocurrir episodios tan lamentables como el vivido».
Zapater y Andreu han valorado que la política y los políticos «tenemos que ser ejemplo para los ciudadanos, y lo ocurrido en el pasado pleno por parte de algunos concejales merece nuestra máxima repulsa». Los insultos personales no pueden tolerarse, la falta al respeto no es democrático. Los representantes que estamos en las instituciones representando a los ciudadanos tenemos que dar ejemplo de comportamiento y decoro necesario para el desempeño de nuestros cargos, han concluido