María Herrero ha presentado una iniciativa en la reitera su rechazo a la decisión de cierre de la DGA, le insta a entablar diálogo con el Ánfora para resolver las diferencias y le traslada su total desacuerdo con una mayor masificación del resto de centros de Cuarte y con la reubicación en otros colegios no elegidos por las familias. El Grupo Aragonés en las Cortes de Aragón ha presentado una proposición no de ley en la que reitera su rechazo a la decisión de no apertura del colegio Ánfora de Cuarte tomada por la DGA, y muestra su honda preocupación por la situación generada tras la desautorización definitiva de apertura.
La portavoz adjunta y portavoz de Educación en el Parlamento, María Herrero, ha lamentado «lo ocurrido» que afecta a 165 niños y sus correspondientes familias, y ha valorado la necesidad de llegar «urgentemente» a un acuerdo «Es muy preocupante que a escasos días del comienzo del curso se haya generado esta situación por no autorizar definitivamente el concierto al Ánfora de Cuarte. Es necesario que se restablezca el diálogo entre la DGA y el centro con máxima voluntad de resolver las diferencias y los problemas surgidos».
Para María Herrero, la realidad, a día de hoy, es que 165 alumnos del colegio Ánfora y sus familias, además de la plantilla de profesorado y promotores de dicha iniciativa y la sociedad en general de Cuarte, están siendo gravemente afectados por la decisión anunciada de no aprobar el concierto provisional dado al centro «Estamos ante un hecho sin parangón y que sienta un precedente realmente preocupante». Lo sucedido, ha dicho Herrero, es una muestra de «un mal entendido ejercicio de la responsabilidad pública». Los avatares acontecidos con este centro educativo «hacen poco bien a la credibilidad y dignificación de la política».
Para María Herrero la educación es una materia especialmente sensible que no debe estar al albur de cualquier cambio de gobierno «no es positivo que se establezcan unas normas del juego acordes con la ideología del gobernante de turno para satisfacer a sus votantes, y si cuando el gobernante cambia sustituirlas por las suyas».
María Herrero ha valorado que la confrontación de ideas entre «derechas e izquierdas» y su concepción de lo «privado y lo público», ha supuesto esta situación lamentable en la que actualmente nos encontramos y que afecta de forma directa a la vida personal de mucha gente » El modelo educativo del que nos hemos dotado mantiene una convivencia armoniosa entre la iniciativa privada y la pública desde hace varias décadas y gracias a ello se garantizó, entre otras cosas, la generalización de la gratuidad en la educación básica».
Para María Herrero el concepto de servicio público nada tiene que ver con la titularidad ni con la gestión de la educación «lo que tiene que hacer un Gobierno es controlar que los fondos públicos destinados sean aprovechados convenientemente, rentabilizados, que la calidad educativa sea la esperada y en igualdad de condiciones para todos los alumnos de la sociedad, vayan al centro que vayan. Nada tiene que ver esto con el intento de minimizar ni la red pública ni la red privada, pues son complementarias e incluso imprescindibles».
Desacuerdo con la masificación de otros centros de Cuarte y con la reubicación en colegios no elegidos por las familias
El Grupo Aragonés traslada al Gobierno de Aragón su desacuerdo con que se masifiquen más todavía los centros educativos de la localidad, así como a que puedan ser reubicados a otros centros no elegidos por las 165 familias.