Comenzamos nuevo curso político en una situación especial en la que cada uno de nosotros servidores públicos que nos dedicamos a la política, deberíamos anteponer el interés general a cualquier otro más privativo o partidista. Vivimos una situación insólita que necesita un comportamiento político excepcional. La situación requiere también un proceder de la sociedad también extraordinario.
El momento sanitario, social y económico no goza, lamentablemente, de tranquilidad. Las administraciones tienen un papel fundamental y todos nosotros también. Tiempos difíciles que hay que lidiar con tesón, medidas efectivas y eficaces, habilidad y responsabilidad. No tengo duda de que una de nuestras fortalezas como Comunidad Autónoma es la centralidad que el Partido Aragonés a través de su presidente, Arturo Aliaga, ha dado al Gobierno de Aragón. Fue una apuesta por la gobernanza transversal, moderada y centrada que está teniendo éxito aunque el camino se ha visto afectado por la irrupción del coronavirus. El desembarco de la multinacional Amazon, los Presupuestos, el Plan energético, el turismo, las pymes, los autónomos….
Aun así se trabaja más y con ahínco. Las Superbikes han llegado este año a Alcañiz por décima vez consecutiva. Todo un acierto mantenerlas. Es triste ver los circuitos sin gente por la Covid-19, pero la realidad es que ponen a la ciudad, a Teruel y a Aragón en los calendarios internacionales del motor donde siempre ha sido una referencia. Así lo expresó Aliaga.
La “interferencia Covid” ha puesto «patas arriba» el día a día y los planes de las personas, las familias, la sanidad, las empresas, los ayuntamientos, los gobiernos autónomos y demás instituciones. Ha erosionado las cuentas públicas, la economía y nuestras propias vidas. Nos ha pillado a traición.
Va a ser un nuevo curso político duro. Personalmente creo que hay que pensar en positivo, hablar en positivo, actuar en positivo y ejercer la responsabilidad individual y colectiva como seres sociales que somos viviendo en un mundo globalizado.
Yo como diputada autonómica por Teruel impulsaré actuaciones y respaldaré aquellas medidas de control sanitario que decida el Gobierno autonómico y aquellas otras encaminadas a favorecer a las Pymes de Teruel y Aragón. Aunque la salud es lo primero no debemos olvidar que hay muchos autónomos, empresas y trabajadores que se están jugando su futuro. Salud y economía van unidas. Lanzo un mensaje de apoyo para flexibilizar cualquier medida que favorezca la actividad económica de Aragón, vital para familias y empresas.
Sería poco justo no hacer referencia explícita a la gran labor que realiza el personal sanitario, los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, los trabajadores de las Residencias, de la limpieza, los repartidores, las cajeras, los farmacéuticos y los agricultores, entre otros muchos.
En fin, yo me comprometo a dejarme la piel en el territorio y por el territorio, a luchar por medidas proporcionadas y dinámicas en función de la situación, a trabajar codo con codo por los pueblos de Teruel y Aragón.
Me considero aragonesa convencida, empática con los problemas de mi territorio, luchadora y una servidora pública convencida. También ante un problema común que traspasa territorios y fronteras. Mi aportación siempre va a estar ahí. Espero y confío en la diligencia y suerte de aquellos que puedan proporcionar una urgente solución a la pandemia y en la generosidad humana, que al fin y al cabo somos partículas diminutas del mismo universo compartido.
Hemos pagado con nuestra libertad, con nuestras empresas, con nuestra salud, con la vida de seres queridos…
Que llegue pronto una vacuna segura y eficaz, que reactivemos la economía y que éste maldito virus nos deje en paz de un vez.
¡Basta ya!
¡Fuera el coronavirus!