(Zaragoza, 09-03-22).- La Comisión Ejecutiva del Partido Aragonés, presidida por Arturo Aliaga, ha aprobado en su última reunión, un acuerdo de apoyo, adhesión y participación del Partido Aragonés para la movilización y manifestación del próximo 20 de marzo, en Madrid, en reivindicación del medio rural aragonés y español.
Según ha señalado Arturo Aliaga, “se trata de un acuerdo importante: el PAR va a ir a Madrid, el día veinte, a defender, en la manifestación que se ha convocado, el medio rural. Están pasando muchas cosas, hay ministros que insultan o que ponen en cuestión los ganaderos, hay muchas cuestiones en el medio rural con el alza de los combustibles, el incremento de algunos productos, de los cereales y abonos, con la sequía… Estamos hablando también de la despoblación”.
El presidente del Partido Aragonés ha recordado que “en la esencia del PAR, desde que nacimos, está esa defensa de nuestro medio rural que también que forma parte de las señas de identidad de Aragón. Los recursos de Aragón una gran parte están en el territorio y en ese territorio, vive mucha gente a la que tenemos que proteger de una manera especial”.
La Comisión Ejecutiva ha aprobado “un manifiesto del PAR en defensa del medio rural con todo lo que eso implica y vamos a ir el día 20 a la manifestación”, ha indicado Aliaga.
En el documento acordado por la Ejecutiva, entre otras consideraciones, el PAR asegura que «el medio rural y sus medios y modos propios de vida, forman parte esencial del pasado, presente y futuro de Aragón. Nuestra Comunidad se configuró a partir de esa realidad y estas gentes. Aragón no se puede entender sin sus pueblos y comarcas, de cuya prosperidad depende el porvenir de todos los aragoneses, también en las ciudades». Por ello, «la crisis casi permanente de la agricultura y la ganadería, y el declive paulatino del medio rura
l, una de cuyas expresiones más graves es la despoblación, deben ser afrontados con decididas medidas que eliminen trabas e inconvenientes y aporten el apoyo correspondiente a una actividad y un colectivo social estratégicos para Aragón y España. Es una cuestión de Justicia».
Para el PAR, «esta razonable demanda se está atendiendo progresiva, aunque demasiado lentamente», aún reconociendo, por ejemplo, la importancia de avances como «la extensión del regadío aragonés, el impulso al turismo rural y comercio local, la dotación de equipamientos y de servicios a través de la comarcalización, la mejora de las comunicaciones, el apoyo a la agroindustria… en Aragón» que han sido fomentados «desde el mismo inicio de la Autonomía y que tienen que continuar porque resultan insuficientes».
Así, para el Partido Aragonés, «es comprensible el creciente malestar del medio rural, en particular cuando la agricultura y la ganadería están sometidas a una reconversión continua desde hace décadas, que acumula un obstáculo tras otro», cuando «se suman situaciones y perspectivas como la incertidumbre de la nueva PAC, el incremento de los costes de producción, la orientación exclusivamente urbana de muchas determinaciones de los poderes públicos, la repetición de declaraciones que suponen una desconsideración injusta contra la ganadería, contra la caza, contra usos y costumbres transmitidos por generaciones…» o también ante «una concentración de servicios que es percibida como un desmantelamiento y abandono de los núcleos más pequeños, mientras un aluvión de regulaciones limita tanto el día a día como los nuevos proyectos, sin contar con su parecer».
«Todo ello, motiva enfado y desesperanza que conlleva la renuncia de muchos vecinos del medio rural a perseverar. De proseguir esa tendencia, la pérdida en la producción de alimentos, en el mantenimiento y conservación del medio natural humanizado, en la preservación de la cultura donde la mayoría de aragoneses tienen sus raíces, traerían consecuencias incalculables en nuestro país. Aragón sería inviable», asevera el manifiesto del Partido Aragonés.
Por el contrario, «los aragoneses debemos ser conscientes del potencial agroganadero y rural de nuestra tierra que no solamente sostiene decenas de miles de empleos y es la columna vertebral de la economía y de la vida de las familias en los pueblos, sino que, además, es un ámbito en el que Aragón presenta recursos que aprovechar con una capacidad competitiva y unas previsiones de desarrollo beneficiosos no sólo para sus habitantes sino para todos en Aragón, porque Aragón somos todos «.
Con todo estos argumentos, el PAR valora que la movilización y concentración en Madrid, el próximo 20 de marzo, convocada por las principales organizaciones agrarias y otras entidades, expresa reclamaciones que «en términos generales, coincide con el ideario y visión de futuro del Partido Aragonés y con la posiciones y propuestas que defiende, desde su constitución, nuestra fuerza política para Aragón y España».
En consecuencia, la Comisión Ejecutiva del PAR ha adoptado un acuerdo concretado en cuatro puntos:
- El Partido Aragonés apoya la manifestación convocada por el medio rural que tendrá lugar el 20 de marzo en Madrid, así como la voluntad de las reivindicaciones que se plantean y justifican este acto. El PAR estará representado en dicha movilización, como ya asistió a la movilización de la España Vaciada en marzo de 2019.
- El Partido Aragonés se compromete a seguir colaborando en aplicar un decidido enfoque de respeto y promoción para el medio rural y sus habitantes, con medidas efectivas, y a defender las aspiraciones y esperanzas de las personas que viven y quieren seguir viviendo en sus pueblos, fundamentales para Aragón.
- El Partido Aragonés llama a todos los partidos, organizaciones, entidades e instituciones de Aragón y España a prestar mayor atención a las demandas del medio rural y las familias que lo habitan, y a agilizar las acciones que respondan justamente a esos planteamientos.
- El PAR denuncia el intento de apropiación partidista e interesada de las reivindicaciones del medio rural que realizan algunas fuerzas políticas, las cuales pretenden ser su representación exclusiva o abanderan la ejecución del trasvase del Ebro y la eliminación de municipios y autonomías que supondrían un ataque directo a ese mismo medio rural y sus vecinos.
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