El Partido Aragonés ha demostrado en el debate sobre el estado de la Comunidad que el aragonesismo de centro es necesario en una Comunidad Autónoma como Aragón que necesita un partido que demuestre con hechos su utilidad política para los aragoneses y aragonesas. El aragonesismo del PAR es inherente al proyecto de Aragón. Que nadie quiera convencernos de aragonesismos imaginarios porque no son reales. No se puede ser aragonesista si políticamente estás sometido a decisiones partidistas de Madrid. Así de fácil. Con la misma contundencia puedo afirmar que el Partido Aragonés siempre ha sido y será un factor de estabilidad para los gobiernos en los que ha participado y participa. Y un impulsor de proyectos. Y miren, pienso que solo con eso ya estaría demostrada su gran utilidad. Sin embargo, el PAR es mucho más para Aragón en cada etapa política. Cumplir y hacer cumplir lo acordado es una norma que destila su forma de entender la política. Nosotros queremos un Aragón centrado, moderado, socialmente más justo y avanzado, verde y digital, como dice mi presidente, Arturo Aliaga. Somos los que activamos los mecanismos de relaciones con el Gobierno de España.
Hechos y gestión, identidad, cultura, derecho foral, patrimonio emigrado, medio rural….esa es nuestra ruta. En cuanto a nuestros municipios huelga decir que su protección es una obligación que forma parte del ADN de mi partido, que considera que allí están los recursos; que hay que ofrecer protección y desarrollo. Tenemos un compromiso adquirido para luchar contra la despoblación, defender el mantenimiento del FITE, las convocatorias MINER de grandes y pequeños proyectos empresariales (2020-2021) y nos sentimos orgullosos de que se haya conseguido que los Fondos de Transición Justa también incorporen un total de 34 municipios de la Cuencas Mineras.
Ahora que se acerca el momento de definir y acordar un nuevo modelo de financiación autonómica estamos convencidos de que Aragón no puede volver a quedarse en el pelotón de los damnificados. Nuestra exigencia al presidente del Gobierno de España ha sido firme para que garantice una financiación justa, ya que otro reparto deficiente ahondaría más en despoblación, y eso iría en contra de lo que los partidos centralistas PSOE y PP dicen defender aquí, en Madrid y en todo el territorio nacional. Será el momento de retratarse políticamente teniendo en cuenta que las autonomías más pobladas quieren que prime el criterio de la población, criterio poco solidario con la España interior donde se encuentra Aragón.
Si en lugar de corregir los desequilibrios y cohesionar el territorio abundamos en egoísmos políticos territoriales, flaco favor haríamos al buen funcionamiento del estado de las autonomías y el reequilibrio territorial estaríamos provocando grandes diferencias de oportunidades y vida, y la despoblación que todos, unos y otros, dicen querer frenar. Nos convertiríamos en pueblos sin risas ni latido. En zonas muertas. Y nosotros somos absolutamente contrarios a esta barbaridad. Recientemente pedíamos a Sánchez en el debate sobre el estado de la Comunidad un Plan para el Desarrollo del Medio Rural con políticas fiscales diferenciadas, medidas con dotación suficiente para luchar contra la despoblación, nuevas tecnologías y que se ejecutaran las partidas económicas incluidas en los PGE. Igualmente la conectividad de última generación en las zonas rurales y urbanas y el desarrollo de las telecomunicaciones. A ver qué pasa.
En el caso de Teruel y su provincia, aunque las posibilidades son grandes en materia turística y economía circular, siempre serán necesarias políticas acordes a sus necesidades. Nosotros siempre lo hemos tenido claro y hemos actuado y actuamos en consecuencia desde la fuerza que nos dan los electores. Por cierto, ningún partido como el ARAGONÉS ha dado ni dará tanto. Que conste mi aserción.