Zaragoza, 24 de febrero de 2018.- El Comité Local del PAR en Zaragoza solicita al Ayuntamiento de la ciudad un estudio sobre la situación de accesibilidad y estancia en los diversos centros cívicos de la ciudad para ubicar con seguridad en su interior carritos de bebé o sillas de ruedas auxiliares de personas con movilidad reducida, y permitir con ello una accesibilidad y estancias en estos lugares más completa y óptima: “reclamamos la instalación de zonas seguras en la que depositar carros mientras realizan la actividad en cuestión con sus hijos, o de forma análoga en el supuesto de las sillas de ruedas auxiliares”.
El establecimiento de estos lugares, cuando ello fuera posible, según el Comité Local del PAR en Zaragoza, ayudaría al “cumplimiento de las obligaciones de dejar libres los pasillos y zonas similares para facilitar una evacuación en caso de emergencia, a la vez que facilitaría también el acceso y disfrute de las actividades realizadas a todas las familias que deben utilizar este tipo de carritos o sillas auxiliares”. Con posterioridad a dicho estudio deberían fijarse qué centros son susceptibles de incorporar esta mejora y fijar su regulación en el propio reglamento de uso de los centros cívicos.
El presidente del Comité Local del PAR en Zaragoza, Sergio Larraga, ha manifestado la necesidad de tener en cuenta que muchas personas que acuden a diversas actividades como conciertos, representaciones teatrales y otras a numerosos centros cívicos de la ciudad se ven obligadas a llevar carritos de bebé y otras necesitan la silla de ruedas para desplazarse desde sus domicilios a dichos espacios. Además, recientemente hemos observado algunos problemas de acceso y, sobre todo, estancia de jóvenes madres/padres que han acudido a determinados centros cívicos con sus bebés en sus carritos y que, al no disponer de una zona habilitada para poder dejarlos (ocurre lo mismo con personas que utilizan sillas de ruedas auxiliares pero pueden andar con la ayuda de muletas en el interior de un recinto), se ven obligadas a renunciar a la actividad que han ido a realizar u observar con sus hijos, o bien a ir acompañados de una tercera persona que se queda fuera con el carrito.
Esta situación, denuncia el Comité Local del PAR en Zaragoza, deriva de la falta de lugares para depositar estos enseres, y también como consecuencia del debido respeto a la actual normativa de centros cívicos -y de otras relativas a accesibilidad- que establece a través del reglamento de funcionamiento en su artículo 41 que “…En cumplimiento de la normativa vigente, los pasillos y accesos son espacios cuya función es facilitar la evacuación del público en de emergencia por lo que está rigurosamente prohibida su obstaculización activa o pasiva…”. En su párrafo 2 se especifica además que “…No se podrá obstaculizar pasillos y zonas comunes con estacionamiento de carros para niños, bicicletas u otros elementos…”. Efectivamente, se trata de una regulación necesaria y vinculante que obliga a despejar los pasillos de estos espacios públicos para evitar tapones y problemas en caso de emergencia. Además, el párrafo 3 de ese mismo artículo 41 establece que los hijos menores de 14 años que acuden a un centro cívico deben estar acompañados por adultos de manera permanente desde su acceso.
Junto a los artículos anteriores, también es necesario tener en cuenta el principio general establecido en el mismo reglamento, dirigido a todos los usuarios sean éstos adultos o niños, en su artículo 51.1 “A hacer uso de todas las instalaciones y materiales necesarios para el desarrollo de la actividad o uso del servicio, siguiendo las normas de uso y procedimientos establecidos en este Reglamento”.
Hace algún tiempo, recuerda Larraga, hubo una amplia reivindicación por parte de padres y madres que reclamaban “poder subir a los buses urbanos con sus carritos de bebé con plena garantía y seguridad, y lo consiguieron”. En un principio parecía un problema “peculiar y afectante a pocos zaragozanos, pero finalmente se evidenció que afectaba a un buen número de familias”. En el caso de esta iniciativa “ocurre exactamente lo mismo, teniendo en cuenta además que a los supuestos de carritos de bebé se añaden las sillas auxiliares de personas con problemas de movilidad que pueden usar en los interiores la ayuda de muletas o similares”.