El PAR considera que urge poner fin a la incertidumbre financiera.
Por un lado es obligado proceder con premura y determinación a delimitar cuales son las entidades comprometidas y valor verdadero de los activos tóxicos para evitar que se extiendan las sospechas sobre todo el sistema financiero y sobre la salud de la economía española como está sucediendo en los últimos días.
Por otro, urge conocer las condiciones del rescate a la banca española y explicar con claridad a la ciudadanía española cual es la situación real. En todo caso, el PAR considera que hay que evitar que dichas condiciones se trasladen a los españoles en forma de nuevos ajustes en políticas públicas en el ámbito del bienestar o la inversión e incluso sobre la capacidad económica y administrativa del autogobierno local y autonómico.
No obstante, pese a las circunstancias de incertidumbre e inquietud, cabe confiar en que a corto o medio plazo, el ‘rescate’ de la banca contribuya a producir los resultados deseables en cuanto a devolver el pulso a la financiación y crédito que sirvan para propiciar las iniciativas de las empresas, profesionales y familias, activando la demanda, la inversión, el empleo y por tanto, la salida a la crisis.
Para el PAR, en España hay que poner en valor -con plena convicción y tesón- la necesidad de un gran acuerdo político y cívico, al modo del alcanzado durante la Transición, que fije un marco transparente de objetivos, entendimiento y colaboración social y territorial, que sirva para evitar la creciente conflictividad y desconfianza y para impulsar el liderazgo de España en Europa en defensa de una política que combine la gestión eficiente con medidas de estímulo al crecimiento económico y de generación de puestos de trabajo que fortalezca el Euro y rejuvenezca la economía española.